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Guía para ciclistas urbanos

El ciclismo urbano crece imparable y las bicis se integran cada vez más en la circulación. Para los que ya disfrutáis de esta experiencia y animar a los que aún tienen dudas, vamos a daros unos consejos para circular en bici de la forma más segura.

Homage de Riese and Müller Bicicleta urbana Homage de Riese and Müller

Beneficios de usar la bici en ciudad

Son varios e importantes los beneficios de usar la bici en nuestras desplazamientos urbanos, tanto de interés personal, como social y colectivo:

  • No contamina, pues, salvo la opción de caminar, la bicicleta es el medio de transporte más inocuo para el medio ambiente.
  • Es el medio más económico, tanto en su adquisición, como en su posterior mantenimiento, con la opción de las bicis de alquiler, presentes cada vez en más ciudades.
  • Es saludable, pues hacemos ejercicio cardiovascular, con todas las ventajas que esto supone.
  • Es el más rápido para distancias cortas en el centro de las ciudades, pero, sobre todo, el más divertido, como podemos ver en este vídeo en el que compiten bici y coche con la colaboración de Jaime Novo, el Alcalde de la Bicicleta de Madrid:

Para disfrutar de todos estos beneficios con seguridad, tenemos que equiparnos de forma adecuada, respetar siempre las normas de circulación y tomar algunas medidas de atención y precaución cuando circulamos con la bici, pues somos los más vulnerables de los vehículos con los que tenemos que compartir la calzada. Vamos a analizar a continuación estos aspectos.

La bici y los accesorios

La primera opción es usar para los desplazamientos en ciudad las mismas bicis que usáis para ocio o deporte, pero las bicis específicas para uso urbano ofrecen ventajas interesantes con respecto a las de MTB y carretera. Sobre todo en el caso de las bicis plegables, si tenemos que compatibilizar el uso con otros medios de transporte o problemas de espacio. Las bicis de asistencia eléctrica, también han dado un empujón notable, facilitando que muchos nuevos usuarios elijan este medio de transporte. Para ayudaros a decidir, en este otro artículo, encontraréis amplia información sobre Cómo elegir una bici urbana.

Bici Mammoth

Sea cual sea la bici que elijáis, hay varios accesorios relacionados con la seguridad de uso obligatorio o muy recomendable:

  • Luces y catadióptricos, que veremos en el siguiente apartado sobre visibilidad.
  • Sistema de frenado.
  • El timbre, que es siempre obligatorio en todo tipo de vías, según la normativa vigente. Pero es especialmente interesante cuando se trata de vías urbanas, para advertir a los peatones de nuestra presencia.
  • Espejo retrovisor, que no es obligatorio en España, pero sí muy recomendable, para tener mayor control sobre el tráfico a nuestro alrededor.
  • El casco ciclista, que, aunque no es obligatorio en vías urbanas, salvo para menores de 16 años, aumenta considerablemente nuestra seguridad en caso de caída o accidente.

Un kit de herramientas básico con lo necesario para arreglar un pinchazo también es aconsejable llevarlo, como en cualquier otra actividad ciclista.

Bolsas, portabultos o alforjas nos serán de gran utilidad para transportar objetos como ordenadores, documentos, herramientas, candados, compras, etc.. Siempre es mejor llevarlo en la bici, que encima de nosotros con mochilas o bolsos. Y los guardabarros será un accesorio casi imprescindible si montamos con tiempo húmedo y ropa de calle.

Hazte muy visible

Para evitar accidentes, lo primero que hay que conseguir es que el resto de los usuarios de las vías nos vean; sobre todo, los conductores de vehículos a motor. Y, para ello, tenemos que usar correctamente luces, catadióptricos y elementos reflectantes. Debemos cumplir, como mínimo, la normativa legal de cada país, para equiparnos nosotros y la bici con elementos de iluminación y visibilidad.

Concretamente, en España, el Reglamento General de Vehículos modificado por el Real Decreto 339/2014, de 9 de mayo, nos indica que, para circular de noche (entre la salida y la puesta del sol), por túneles o cuando se reduzca la visibilidad por las condiciones meteorológicas o cualquier otro motivo, es obligatorio llevar:

  • Luz blanca de posición delantera
  • Luz roja de posición trasera que, aunque el reglamento cita como fija, una directiva de la Dirección General de Tráfico permite llevar intermitente para aumentar la seguridad de los ciclistas.
  • Catadióptrico rojo trasero no triangular, aunque llevemos luz trasera, para mantener la visibilidad siempre.
  • Una prenda reflectante cuando circulemos por vías interurbanas. En vías urbanas no es obligatorio, salvo que la normativa del municipio sea más estricta, pero es muy recomendable. No tiene que ser necesariamente un chaleco, aunque es la prenda más recomendable en vías de tráfico compartidas.

Y, aunque no son obligatorios, también recomienda los elementos reflectantes amarillos en ruedas y pedales.

Nuestra recomendación es que utilicéis las luces en todos vuestros desplazamientos, de día y de noche, y que aumentéis la visibilidad usando colores claros en la ropa y complementos, como casco y zapatillas.

Podéis ampliar la información en este vídeo sobre la visibilidad en bici:

En cuanto a las luces, profundizamos ampliamente en este otro artículo, en el que os explicamos Cómo elegir luces para ciclismo y en este vídeo sobre el mismo tema:

Protege tu bici

Si tenemos que dejar la bici aparcada en el exterior, es fundamental elegir sistemas antirrobos adecuados y coherentes con el riesgo potencial de robo al que vamos a exponer la bici y su valor. No hay sistemas totalmente infalibles pero, cuanto más difícil se lo pongamos, menos posibilidades tendremos de que roben nuestra bici. Violar un candado de alta seguridad requiere de medios sofisticados y de un largo tiempo de manipulación, que no emplean la mayoría de los ladrones en la vía pública. En este otro artículo con Consejos para elegir un antirrobo, analizamos sus tipos y os damos importantes recomendaciones para aumentar la seguridad de vuestras bicis.

Atar una bici Cómo atar una bici de forma segura

10 consejos para circular en bici con seguridad

Salvo en algunas ciudades pioneras, sobre todo del centro y norte de Europa, aún nos queda mucho camino por recorrer para integrar completamente las bicicletas en el tráfico urbano, pero van ganando terreno de forma inexorable, sobre todo en la última década. Han aumentado las infraestructuras, aunque no haya sido al ritmo y con la calidad que nos gustaría, y las leyes y normas de Seguridad Vial se van adaptando poco a poco para proteger a los ciclistas. Todo esto ha hecho posible que las bicicletas sean una alternativa real de movilidad urbana y que su uso sea tan seguro como otros medios, si tomamos las medidas de precaución y seguridad en la conducción que vamos a analizar a continuación.

1. Respeta las normas de circulación

La bicicleta es un vehículo más y, por nuestra propia seguridad y para que nos respeten los conductores y el resto de usuarios de las vías, los ciclistas tenemos que cumplir también las normas de circulación en su integridad. También estamos sometidos a las mismas limitaciones, como por ejemplo la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas. Vamos a recordar las infracciones que se ven con más frecuencia en las ciudades:

  • No parar en los semáforos. Las bicicletas tienen que respetar los semáforos, como el resto de los vehículos. Cuando se trata de giros a la derecha, podemos encontrar excepciones señalizadas con luces específicas para ciclistas, o normativas municipales que lo autoricen. Revisad la normativa de vuestra ciudad, por si establece algo al respecto. Si no es así, hay que atenerse a la norma general.
  • Circular por aceras y zonas peatonales, cuando está prohibido para toda clase de vehículos. Si bien, las ordenanzas municipales pueden establecer excepciones en las llamadas acera bici de uso compartido o en zonas peatonales de interés. Pero siempre respetando la prioridad de los peatones y manteniendo la distancia de seguridad que, según los municipios, está establecida entre 1 y 1,5 metros.
  • Cruzar pasos de cebra montados en la bici, cuando solo está permitido si existe un paso específico que forme parte de un carril bici o acera bici. No siendo así, el ciclista tiene que cruzar andando, porque, si no, aparte del riesgo de multa, asume la responsabilidad en caso de colisión o accidente de bicicleta con vehículos o peatones.
  • Usar auriculares, teléfonos móviles u otros dispositivos electrónicos. Los ciclistas están sujetos a las mismas limitaciones que el resto de los conductores de vehículos.
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2. Intenta utilizar carriles bici o aceras bici

Siempre que sean viables, o, en su defecto, las calles con menos tráfico. Aunque recordamos que no es obligatorio el uso de los carriles bici. En muchas ocasiones, son impracticables, sobre todo, para bicis de carretera, o son utilizados por peatones, haciendo inseguro su uso. Aunque siempre los recomendamos, puedes elegir el carril o la calzada.

3. Circula por el centro del carril en las calzadas

Y siempre por el carril que se encuentra más a la derecha. En ciudad no hay arcenes por los que circular, habitualmente, y no es obligatorio situarse a la derecha del carril por diversas razones de seguridad:

  • Si nos arrimamos a la derecha, podemos incitar a los coches a adelantarnos sin guardar la distancia de seguridad mínima, porque es físicamente imposible en la mayoría de los carriles urbanos, sobre todo si hay más de uno por sentido.

  • Si circulamos muy cerca de los vehículos aparcados, nos exponemos al riesgo de las puertas que se abren de repente o los coches que inician la marcha sin vernos. Podemos chocar con ellos, o exponernos al atropello de otros vehículos al esquivarlos.

  • Somos más visibles para otros vehículos al acercanos a los cruces si vamos por el centro del carril.

Bicis por el centro del carril Bicis por el centro del carril

4. Podemos salir del carril de la derecha

Cuando haya más de un carril por sentido en estas situaciones:

  • Para girar a la izquierda.
  • Para adelantar a vehículos más lentos

Señalizando correctamente la maniobra, como veremos en el siguiente punto, y evitando circular en medio de dos carriles, pues es la ubicación más peligrosa para un ciclista. Mantente en el centro de uno de los carriles, hasta que puedas cambiar al otro con seguridad. Y recuerda que no podemos utilizar el carril bus, salvo que esté autorizado por las ordenanzas municipales o por alguna señal de tráfico específica.

5. Señaliza siempre las maniobras y conduce de forma predecible

Evitando zigzagueos y maniobras bruscas. Para avisar de nuestras maniobras, utilizaremos las señales manuales que recogen las normas de circulación y que son reconocidas internacionalmente.

Señales maniobras en bici Señales maniobras en bici

6. En rotondas

Circula como el resto de los vehículos, ocupando completamente el carril que corresponda, para evitar adelantamientos indebidos y ser más visible para los que se incorporan. Extrema las precauciones, pues son puntos muy conflictivos para los ciclistas. Te recomendamos que intentes establecer contacto visual con los conductores que se van a incorporar mirándoles a los ojos. Si ves que no te miran, piensa que pueden no haberte visto, aunque parezca difícil. Y, si no ves con claridad que está frenando, frena tú si hace falta. Siempre es mejor renunciar a la prioridad, que sufrir un atropello.

Si circuláis en grupo, cuando el primer ciclista se ha incorporado a la glorieta, el grupo entero tiene prioridad ante vehículos que lleguen en ese momento, como si fuera un solo vehículo. El primer ciclista, por supuesto, tiene que respetar las normas para entrar en la glorieta.

7. Evita los ángulos muertos de los vehículos

Hay zonas que no son visibles en los espejos retrovisores, sobre todo en vehículos grandes, como furgonetas, camiones o autobuses. El conductor no nos ve en esa ubicación y tenemos que permanecer en ella el menor tiempo posible. Tenlo en cuenta muy especialmente cuando estos vehículos van a girar.

Ángulo muerto vehículos Ángulo muerto vehículos (Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo)

8. Pon especial atención en los cruces de calzadas con carriles o aceras bici

Los ciclistas tienen prioridad en los cruces o giros de vehículos cuando circulan por carriles bici, pasos de ciclistas o arcenes debidamente señalizados, pero este tipo de cruces son uno de los puntos negros para los ciclistas, por el desconocimiento de algunos conductores, los ángulos muertos o, simplemente, la falta de atención. Una vez más, os recomendamos extremar las precauciones en estas situaciones.

9. Mantén el respeto al tráfico, pero pierde el miedo a moverte en bici

Hay que tomar las calzadas y las ciudades para sentar las bases de un futuro sostenible y un medio de transporte saludable. Si observas las recomendaciones que te hemos dado, circular en bici es seguro, pero no bajes la guardia nunca y mantén la atención en el resto de los vehículos en todo momento. Anticiparte a sus movimientos o reaccionar ante los imprevistos, es tu mayor garantía de seguridad.

10. Ten buen talante, evita las discusiones y disfruta del camino

Aparte de la ira y la irritabilidad habitual con la que algunos se desahogan cuando conducen, muchos conductores no aceptan la presencia de las bicicletas en las calzadas y carreteras, considerando que somos un obstáculo para su uso legítimo que es el de los vehículos a motor. Vamos a demostrar que la bici también es la mejor medicina para esas tensiones y a desarmar su agresividad con amabilidad.

Confiamos en que estos consejos y recomendaciones para la movilidad urbana en bici ayuden a los que ya sois ciclistas urbanos, y también animen a todos aquellos que lo están pensando y a los que hayan descubierto esta posibilidad leyendo este artículo.

En las tiendas Mammoth y en nuestra tienda online mammothbikes.com encontraréis el asesoramiento de nuestros profesionales y la más amplia gama de bicis urbanas y accesorios y complementos recomendados para ciclismo urbano.

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